Quiero un pueblo unido en paz y control.
Esta podría ser la formula para lograr el equilibrio emocional de nuestro país…paz y control.
Pasadas las elecciones lo importante es reconocer que todos somos hermanos y hermanas puertorriqueños que cada día que pasa aspiramos a ser mejores ciudadanos. El respeto hacia las diferencias de los demás debe prevalecer en nuestras familias, en los escenarios laborales y en la vida cotidiana para que podamos enfocarnos en las soluciones y los proyectos de vida que sean necesarios para nuestro desarrollo como pueblo.
Terminó el proceso electoral y ganó la democracia…damos gracias a Dios y ahora nos preparamos para disfrutar la llegada de la navidad, la epifanía y las octavitas.
A escuchar música navideña, a comer pasteles, arroz con gandules y mucho lechón. Vamos a lograr una despedida de año sin disparos al aire, que no hayan personas heridas por balas perdidas.
Yo también quiero un pueblo unido en paz y control.
Foto tomada por: Oficina Prensa Municipio de Cayey, PR
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